El malware puede llegar a tus sistemas de muchas maneras. Esto se debe a que, como todos los virus, estos evolucionan para ser más eficientes. A través de las redes, te vas a encontrar siempre amenazas de todo tipo, por lo que siempre debes tener protección ante tales amenazas. No obstante, debido al aumento de ciberataques con virus y malware cada vez más sofisticado, algunas herramientas de seguridad y protección no pueden combatirlo.
Si necesitas atención inmediata debido a que has sido atacado por hackers o sospechas de un ciberataque, TIC Defense tiene todo lo necesario para proteger tu información y responder efectivamente ante las contingencias. Nuestro personal de seguridad es de primer nivel, teniendo en cuenta que contamos con expertos en distintas áreas de seguridad informáticas.
El malware polimórfico es un software malicioso que dispone de una especie de núcleo que se comporta siempre de la misma forma. Modifica el resto de su código para mantenerse actualizado de acuerdo a las herramientas antivirus que tenga instalada un ordenador. No importa cuántas veces cambie una tecnología, siempre va a atacar de la misma manera, ya que va a realizar las mismas acciones una vez infecte un dispositivo.
Este tipo de malware es más sencillo de identificar y de eliminar de los sistemas. Esto se debe a que las herramientas antimalware detectan el núcleo, lo identifican y lo eliminan. Además, el malware polimórfico afecta de forma negativa tus dispositivos, ya que, una vez que ingresan y cumplen con su función, el ordenador afectado podría generar un nuevo tipo de malware, o una variedad mejorada.
Muchos tipos de virus simples son polimórficos, como los virus, gusanos, bots, troyanos o keyloggers. El malware polimórfico debe tener características identificables que puedan cambiar, tales como nombres, tipos de archivos y claves de cifrado. Esto para que sea irreconocible ante las técnicas de identificación y detección.
El polimorfismo es usado para que el malware pueda evadir con éxito la detección de coincidencia de patrones, ya que en esto se basan las herramientas de seguridad, como un software antivirus, por ejemplo. Como te reiteramos, las características de identificación del malware polimórfico pueden cambiar, pero el propósito para lo que ha sido creado (núcleo) sigue siendo igual.
Un malware de estas características va a continuar propagándose e infectando múltiples computadores, incluso si las firmas cambian para evitar la detección. Cuando cambian algunas características con el objetivo de generar una firma nueva, las herramientas antivirus y antimalware no van a reconocer el nuevo código malicioso. Incluso, si una solución de seguridad identifica una nueva firma y se agrega a su base de datos, este malware puede seguir cambiando firmas y produciendo ataques sin que su núcleo sea detectado.
En términos de ciberseguridad, el polimorfismo se entiende como algo no muy positivo. En este caso, el concepto polimórfico está referido a la capacidad que tiene un software para cambiar y adaptarse con rapidez ante un nuevo esquema de detección, para evitar ser identificado. Además, puede emparejar un motor de mutación con un código que se auto propaga, esto para cambiar su apariencia de forma continua. Incluso, emplea un cifrado y otros métodos para poder ocultar su núcleo.