La tecnología Wi-Fi se está volviendo más rápida y esto es una excelente noticia. Con la creciente demanda de un Internet más rápido debido al consumo de apps, juegos y videos en nuestros dispositivos portátiles, Wi-Fi 6, la generación de Wi-Fi que se está implementado, no solo ofrece un aumento en la velocidad, sino una serie de mejoras que se están experimentando.
Wi-Fi 6, también conocido como 802.11ax, se enfoca en garantizar que las velocidades no se detengan en unos pocos años, en lugar de ser un aumento único de velocidad. A medida que comienza a implementarse, es muy probable que lo encuentres en los próximos teléfonos y ordenadores portátiles.
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Esta es la próxima evolución de la tecnología Wi-Fi. Aunque sigue conectándote a Internet, incluye una serie de tecnologías adicionales que mejoran la eficiencia de las conexiones y, como resultado, aceleran las velocidades y aumentan la ciberseguridad en general.
En cuanto a la velocidad, Wi-Fi 6 ofrece un máximo teórico de 9.6 Gbps, en comparación con los 3.5 Gbps de la tecnología anterior. Sin embargo, es importante tener en cuenta que estas velocidades máximas son teóricas y poco probables de alcanzar en el uso cotidiano.
Aunque las velocidades máximas teóricas de Wi-Fi 6 son significativamente más altas que las de su predecesor, su verdadero beneficio radica en su capacidad para dividir esas velocidades entre múltiples dispositivos en una red.
En lugar de enfocarse únicamente en aumentar la velocidad de los dispositivos individuales, se concentra en mejorar el rendimiento de la red cuando se conectan varios dispositivos de manera simultánea.
Esto es particularmente valioso hoy en día, ya que los hogares ahora tienen un promedio de 9 dispositivos Wi-Fi y se espera que este número aumente a 50 en los años por venir. Con la creciente cantidad de dispositivos conectados a una red, los routers tradicionales pueden verse abrumados, lo que ralentiza el rendimiento general.
Wi-Fi 6 introduce nuevas tecnologías para mitigar estos problemas, permitiendo que los routers se comuniquen con más dispositivos simultáneamente, que envíen datos a varios dispositivos en una sola transmisión y programen registros de conexión de dispositivos Wi-Fi.
Además de mejoras en la velocidad y el rendimiento, también ofrece una mejora en la seguridad. Se ha introducido el protocolo WPA3, el último protocolo de seguridad para Wi-Fi en 10 años. WPA3 dificulta que los hackers adivinen contraseñas y hace que los datos sean menos útiles en caso de que sean interceptados.
Aunque algunos dispositivos actuales admiten WPA3, no es algo obligatorio. No obstante, para obtener la certificación de Wi-Fi Alliance, un dispositivo Wi-Fi 6 debe ser compatible con WPA3, lo que significa que la mayoría de los dispositivos con esta tecnología ofrecerán una seguridad más sólida.
Aunque los dispositivos compatibles con Wi-Fi 6 aún son limitados y actualmente son de gama alta, se espera que esta tecnología se extienda a los dispositivos móviles de alta gama este año. El último procesador insignia de Qualcomm, el Snapdragon 855, incluye soporte para Wi-Fi 6 y se espera que muchos teléfonos de primera línea lo adopten.
